El Hércules ganó 2-0 en la tercera ronda de la Copa del Rey a Las Palmas, un equipo que aunque parezca difícil, está peor que los alicantinos.
El partido fue malo y el Hércules ganó porque definió las pocas ocasiones de que dispuso, algo que no ha hecho en sus últimos enfrentamientos ligueros. Los dos goles llegaron en la segunda parte, el primero fue obra de Turiel que remató un golpe franco muy bien ejecutado por Montenegro. El segundo fue obra de Piti a pase de Moisés, que resolvió un contragolpe muy bien llevado cuando Las Palmas se volcaba en el ataque para intentar la igualada.
El resultado es bastante engañoso porque el dominio de la posesión fue de Las Palmas y tuvieron ocasiones claras para marcar, y sólo la buena actuación de Aragoneses pudo evitar que se convirtieran en gol.
La grada de nuevo volvió a pedir la dimisión del técnico herculano Pepe Bordalás en varias fases del partido y de forma mayoritaria. Todo hace pensar que si las actuaciones ligueras no mejoran, poco tiempo le queda a Bordalás en el banquillo del Hércules.
Decir que nuestro eterno rival, el Elche, no pudo superar al Valladolid y salió derrotado en su propio campo por 0-1, lo que le deja fuera de la competición. Si a esto le unimos su pésima situación liguera (más abajo aún que el Hércules), podemos observar que este año los dos eternos rivales llevan vidas paralelas.
El partido fue malo y el Hércules ganó porque definió las pocas ocasiones de que dispuso, algo que no ha hecho en sus últimos enfrentamientos ligueros. Los dos goles llegaron en la segunda parte, el primero fue obra de Turiel que remató un golpe franco muy bien ejecutado por Montenegro. El segundo fue obra de Piti a pase de Moisés, que resolvió un contragolpe muy bien llevado cuando Las Palmas se volcaba en el ataque para intentar la igualada.
El resultado es bastante engañoso porque el dominio de la posesión fue de Las Palmas y tuvieron ocasiones claras para marcar, y sólo la buena actuación de Aragoneses pudo evitar que se convirtieran en gol.
La grada de nuevo volvió a pedir la dimisión del técnico herculano Pepe Bordalás en varias fases del partido y de forma mayoritaria. Todo hace pensar que si las actuaciones ligueras no mejoran, poco tiempo le queda a Bordalás en el banquillo del Hércules.
Decir que nuestro eterno rival, el Elche, no pudo superar al Valladolid y salió derrotado en su propio campo por 0-1, lo que le deja fuera de la competición. Si a esto le unimos su pésima situación liguera (más abajo aún que el Hércules), podemos observar que este año los dos eternos rivales llevan vidas paralelas.
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